Skinwalker ranch (2013)

Hacía algunos meses que no me traía al Desván una de esas películas que, como suelo decir, siempre funcionan conmigo. Volvemos a pisar el terreno del terror en forma de falso documental, y lo hacemos con un filme que no ha llegado a estrenarse en nuestro país. Ni parece tener visos de ir a hacerlo próximamente. Los más curiosos tendrán que acercarse esta vez a la versión original.

Un filme, “Skinwalker Ranch”, que parte de esa premisa tan atractiva pero peligrosa: “Basada en hechos reales” Y sí, al parecer el rancho Skinwalker existe. Y sí, al parecer hay testimonios sobre avistamientos y sucesos extraños en este lugar. Desde luego, un lugar perfecto para un  filme como este, aunque Devin McGinn y especialmente Adam Ohler, que está aquí tras el guión, se hayan pasado un poco de rosca. Pero vamos por partes.

La historia es una de tantas con estos mismos tintes. Comienza con la desaparición de un muchacho, el hijo de la pareja de granjeros que habita en el rancho. Tras un suceso tan atípico, un grupo de investigación de lo más variopinto llegará al lugar. Llenarán la zona de cámaras, revisarán las grabaciones, comenzarán a hacer diversas pruebas… Y se liará parda, por supuesto.

Como suele ocurrir en este tipo de películas, no tenemos grandes interpretaciones. La miga y la mayor baza está en esa constante grabación casi en primera persona. La tensión que transmite el hecho de convertirse, casi, en un miembro más de ese equipo de investigadores. Y en cuanto a calidad y efectos especiales, la verdad es que el filme es bastante solvente, al menos en algunas escenas. Se ve que el presupuesto no ha sido un escollo en este caso.

¿Falla entonces esta “Skinwalker Ranch”? Diría que sí. O, al menos, es una idea que podría haberse aprovechado bastante mejor en cuanto a guión. Porque deriva, al final, hacia una mezcolanza de fenómenos paranormales de todo tipo que se dan en este lugar en cuestión. Y ahí está parte del problema: da la impresión de que esta “Skinwalker Ranch” pretende abarcar demasiado. Tenemos mutilaciones de ganado y extrañas luces que sugieren una fenomenología OVNI, hasta aquí podríamos decir que el filme se inspira en esos proclamados “hechos reales”. Pero también tenemos insólitos sonidos, apariciones fantasmales, criaturas monstruosas y hasta tintes atávicos. Incluso intuimos cierto campo para la conspiración gubernamental. Un compendio demasiado amplio que resta mucha solidez y es un constante lastre para el filme.

Aún así, si os van este tipo de pelis y queréis desconectar un rato, lo cierto es que al menos entretiene. Hoy os quedáis con el tráiler, para haceros una idea: