La
novela que hoy he querido subirme al Desván no destaca en lo típico. No
creo que tenga un puñado de protagonistas magnéticos de esos que pueden hacer
que una trama se nos quede grabada en la memoria. Tampoco la propia línea argumental es demasiado innovadora,
más bien se amolda, en ese equilibrio y en ese pulso que rige la acción, a los thrillers más
tradicionales.
Y
pese a ello, "Paris
2041" es una novela que me ha gustado especialmente.
¿Dónde está, entonces, el “gancho”,
eso que hace que merezca la pena acercarse a estas páginas? Sin
duda en el contexto, en el
escenario que Ezequiel Szafir nos va delineando página tras página.
Podríamos hablar de ciencia ficción
cercana, de uno de esos futuros
inquietantes, descorazonadores,
pero también plausibles. De una novela, si queréis, de esas que no son precisamente
amables.