Lo he comentado algunas veces cuando aparece alguna reseña
en vuestros blogs, pero hoy lo traslado al mío propio. Soy fan absoluto de las
compilaciones de relatos. Es un formato literario que me encanta. No satura, es
más flexible de cara a posibles interrupciones (por aquello de que nunca me ha
gustado dejar un capítulo a medias) y puede deparar sorpresas. Algunas
agradables. En una de esas excursiones que procuro hacer todas las madrugadas
por la blogosfera, me encontré con una reseña de Aran, que me recordó
una de esas sorpresas. Hoy quiero compartirla con vosotros.
Leí el primer relato de Luis Bermer en un foro al que era
asiduo. Fue mucho antes de que “Cortadle la cabeza y otros relatos de terror”
tomase forma física, pero su estilo consiguió encandilarme desde el primer
párrafo. Su estilo, su concepción del terror y un toque de originalidad siempre
crucial en esto del relato.
Este libro compila veintisiete relatos en poco más de 140
páginas. Veintisiete horrores o, al menos, veintisiete maneras de entender o
interpretar el terror. Hay historias más explícitas, como “Responsabilidad
personal”, “De piedra es el hombre” o el “Cortadle la cabeza” que da nombre a
la antología.
Pero también encontramos relatos distintos, que apuestan por
un terror más psicológico y más cotidiano. Bermer construye personajes casi
siempre atormentados, nos aproxima a sus soledades y nos acerca a sus
pensamientos a través de los relatos. La muerte y la soledad son terrores muy
extendidos, y quizás por ello se convierten en los temas más recurrentes.
Siguen esta tendencia el genial “Vania” y otros como “Sólo estar solo”.
Hay más historias, y en muchas destaca un aspecto que,
sabéis, siempre valoro muchísimo en una lectura: la ambientación. Historias
como “El Sr. del Mal” y sobre todo “Pesadilla en un campo de cabezas” nos
trasladan a lugares abyectos y caliginosos, en una atmósfera oscura y recargada
que sólo podemos asociar con lo onírico. Son historias un tanto lovecraftianas
cuyo fin máximo parece ser convertirnos en personajes, trasladarnos a estos
escenarios, hacernos caminar por los senderos de esos mundos casi imposibles.
No faltan los niños, ese elemento tan especial y que tanto
nos trastoca cuando surge en una historia de terror. En este caso, tanto “Un
saco de ilusiones” como “Seis de enero” parten de una premisa similar: Niños
por protagonistas, acontecimientos sin duda felices y esperados (La noche de
Reyes y la llegada de Papá Noel) y el terror, que germina en cualquier campo de
cultivo.
Hay mucho más: hay apariciones monstruosas y salas de espera
con aires de metáfora. Hay conciencias atípicas y fatídicos duelos que nos
hacen viajar hasta el lejano Oeste. Hay sangre y vísceras, pero también
oscuridad, soledad y muchísimo espacio para la muerte y lo existencial. Y aún
queda lugar para cierta pala que escarba sin cesar hasta hacernos reflexionar
sobre la sociedad en la que vivimos.
Una recopilación a tener en cuenta si os va esto del terror
en una vertiente algo más atípica. Veintisiete relatos que se leen en un
suspiro. O, si compartís más mi concepción del relato, veintisiete suspiros que
se prestan perfectamente a ser intercalados entre lecturas.
Me alegra saber que facilité tu reencuentro con las sorpresas;)
ResponderEliminarFijate que a mi me sucede igual con los relatos. Son perfectos para evadirte en periodos cortos, y como dices, que no te alteren demasiado las interrupciones.
Con los de los niños consiguió que olvidase que estaba leyendo terror, al menos al principio.
Un besote
Tenía el libraco ya casi perdido en la estantería y sí, tu reseña me despertó su relectura.
EliminarComo dices, los niños siempre son figuras particulares en esto del terror. Es muy fácil generar contrastes con ellos y tienen esa fuerza empática de que todos hemos sido críos alguna vez.
Compartimos afición por esto de los relatos :) ¡Besotes, Aran!
Todavía tengo que aprender a escribir mis opiniones sobre libros de relatos. Será mi reto para el año 2013. Un abrazo.
ResponderEliminarJajaja, sí es cierto que es bastante distinto a reseñar una novela.
EliminarEl secreto para un memoria de pez como yo es anotar todo lo que se te vaya ocurriendo, y después construir el puzzle. Pero soy el primero que aprende cada día un poco a reseñar leyendo por la blogosfera, o sea que tampoco me hagas demasiado caso ;)
Un abrazo!
Pues este me lo apunto, que últimamente le estoy cogiendo el gusto a las antologías.
ResponderEliminarClub de Fans de las antologías ya!!
Eliminar¡Un besín!
me ocurre lo contrario que a ti, no me animo nada a leer libros de relatos, me cuesta un montón cogerlos de la estantería a pesar de que luego me gustan. En este caso creo que no me animaré
ResponderEliminarbesos
También depende mucho de momentos, Tatty. Si estoy en una lectura que me fascina especialmente, a veces me cuesta interrumpirla e intercalar relatos por medio. Es como si prefiriese que me atrape por completo y me dejase llevar. Pero también a veces me cuesta más arrancarme con una novela más densa, y me quedo entre relatos. O los uso entre medias, que es lo más habitual. Como digo, cuestión de momentos :)
EliminarBesines
Buenos dos se han unido (Aran y tu) para traer zombis, vampiros y terrores nocturnos a mi morada, ajajaja.
ResponderEliminarNo sabía de tu debilidad por los relatos o por los suspiros que se prestan perfectamente a ser intercalados entre lecturas (esto último me ha encantado).
Y el libro, pues mira, no te diré que no, a dosis no está nada mal para mi temerosas experiencias lectoras.
Besos tertuliano
Es que los que vivimos un poco entre sombras siempre nos confabulamos para hacer nuevos adeptos, Marilú, como debe ser jajaja.
EliminarSí que adoro los relatos, mejor entre lecturas. Creo que es cuando más los disfruto, supongo que por aquello de desconectar. En este caso además era relectura, que siempre conseguimos ver cosas que en una primera lectura se nos pasaron.
Besines, hoy soleados! :)
Me ha llamado la atención, además así vario un poco la temática habitual de mis lecturas.
ResponderEliminarBicos ^^
Si te animas ya me cuentas, MAV. Se leen en un suspiro además :)
EliminarBiquiños.
Muchas gracias por tu reseña, Rober. Me ha sorprendido y gustado por igual :)
ResponderEliminarY mira que no resulta nada fácil reseñar un libro de relatos, pero creo que tú has conseguido destacar e informar acertadamente de lo que les espera a los que se "atrevan" a abrirlo.
Todo un detallazo que no olvidaré ;)
Gracias, hombre. Para alguien que creía no saber reseñar relatos, comentarios así son un regalazo.
EliminarMe alegra que te haya gustado, un placer tener al propio autor por el desván :)
Abrazotes.
Yo siempre ando reticente con los relatos...me cuesta mucho animarme y eso que este año he hecho muchas excepciones...pero no me lo apunto, que tengo varios apuntados y otros tantos relatos (sobre todo de zombies) esperando en casa.
ResponderEliminarUn beso!
Hay gente a la que le cuesta animarse con ellos, Lesincele. Yo creo que es un poco dar los primeros pasos y pillarles el gusto. Puede llegar a disfrutarse tanto o más que con las novelas en ocasiones.
EliminarPuedes toparte con cosas magníficas entre zombies, por cierto :)
Besos.
Te voy a confesar algo: me gusta mucho cómo escribes las reseñas. Se nota que sabes de lo que hablas, que te has informado, y lo expresas genial. A mí también me gustan mucho los relatos; creo que los escritores que se centran en ellos deben de reunir las cualidades necesarias para condensar en pocas palabras miles de sensaciones, por eso los hace tan especiales.
ResponderEliminarMuchas gracias por la reseña, un beso.
Gracias por la parte que me toca, Mar, de verdad. Lo expreso, creo, de la única manera que sé o sea que es un placer que te guste.
EliminarCompartimos opinión. No todo el mundo es capaz de fascinar con los relatos, y no todos los autores tienen el minimalismo y la capacidad de concretar y a la vez transmitir tan necesarios en este formato.
Un besazo, Mar :)
Tiene buena pinta. Y me gustan los libros de relatos... así que me lo apuntaré para buscarlo
ResponderEliminarBesos
Autoeditado y por bubook el físico, por cierto, que olvidé mencionarlo en la reseña ;)
EliminarBesines!