Vengo hoy con una de las series más genuinas con las que me
he encontrado últimamente. Me atrajo el hecho de que fuese promocionada como
una crítica hacia la sociedad tecnológica en la que vivimos, así que me decidí,
no sin ciertas reservas, a darle una oportunidad.
“Black Mirror” es una miniserie británica creada por Charlie
Brooker. Se balancea entre el drama y la ciencia ficción y consta de tres
episodios completamente independientes. Todos ellos muy distintos, aunque con
un mensaje común.
Como aperitivo, tenemos a Michael Callow, Primer Ministro,
que una buena mañana se despierta ante la noticia de que la Princesa Susannah ha sido secuestrada.
Para liberarla, sus captores no exigen suma alguna, sino que Michael tenga sexo
con un cerdo, en directo y para toda la televisión británica. El tratamiento
que se le da hoy en día a la información, combinado con el impacto y el poder
de las nuevas tecnologías da lugar a esta trama que en algunos puntos roza el
absurdo, aunque sin desligarse en ningún momento de una atmósfera de realidad y
cotidianidad.
También nos toparemos con Bing y Abi, dos jóvenes que
habitan en un universo prácticamente virtual en el que tienen que pedalear en
unas máquinas para procurarse su sustento. Entre ambos no tarda en surgir un
afecto especial y Abi, con una voz prodigiosa y la ayuda de Bing, decide
presentarse a “Hot Shots”, un certamen al más puro estilo “Factor X”. Nada
resultará, sin embargo, ser como parece. Una historia que invita a la reflexión
precisamente en un ámbito en el que pocas veces lo hacemos: nuestro tiempo
libre, el que dedicamos simplemente a entretenernos. Y, de paso, un reflejo de
esa dependencia ante lo virtual que cada vez se antoja más próxima.
Para finalizar, nos adentraremos en la vida de Liam y Fifon,
una pareja que vive en un mundo en el que cada uno puede borrar, pero también
rebobinar y prácticamente vivir de nuevo cada uno de sus recuerdos cuando lo
desee, gracias a un pequeño dispositivo (“grain”, desconozco la traducción que
le han dado en castellano) implantado tras sus oídos. Liam, abogado de éxito,
comienza a sospechar que Fifon le es infiel, y a rebuscar entre su archivo de
recuerdos evidencias que lo prueben. Veremos que ese invento, el “grain”, que
parece no encerrar inconvenientes, ha ido mermando la vida de la pareja hasta en
la esfera más íntima. Hace a quienes lo tienen anclarse en sus pasados,
revivirlos, renegando del presente. Una trama que explora valores como la
confianza, la fidelidad y la sinceridad y los contrapone a la tecnología. Como
un susurro que nos advierte que hay elementos, esos que nos hacen sentirnos
humanos, que no deberíamos alterar.
Una
serie distinta, sin fantásticos giros argumentales o personajes magnéticos.
Aquí la miga está en el trasfondo, en lo que cada capítulo nos sugiere más allá
de la trama. Con pinceladas de aquí y de allá, Brooker ha logrado un
inteligente retrato de lo que para él es, o puede llegar a ser, esta sociedad.
Y la pregunta que flota, velada y muda tras “Black Mirror”, es si realmente
esto es lo que queremos.
Desde luego una serie nada convencional que parece romper todos los esquemas de una sociedad que parece querer imponernos el ideal de tecnología=mejor calidad de vida. Intentaré verla.
ResponderEliminarUn abrazo Rober!!!!
No te defraudará Ana, el mensaje parece ser justo el que dices :)
Eliminar¡Besazos!
¿Te gustó?
ResponderEliminarYo la he visto hace poco y se me quedó un poquito corta. Me dió la sensación de haberse quedado por el camino... no por falta de acción que no se trata de eso, sino de profundizar. Especialmente en el último capítulo.
Besos
Estoy contigo, podría haber ahondado más en muchas cosas. Pero no sé, me dejó esa sensación de haber incidido lo justo para tocar la fibra y dejar el resto para la reflexión del espectador.
EliminarEl último quizás sea el más flojo de los tres y, por ser el último, deja un poco sabor agridulce. Pero en general me gusta, por el planteamiento, sobre todo. Debería haber más series de este estilo.
¡Besines! :)
Uf, no sé... necesitaría investigarla un poco más para ver si me decido, asi de entrada...
ResponderEliminarUn placer pasar por aquí.
Besos
Lupa
Un placer tenerte por aquí, Lupa.
Eliminar¡Besotes!
No se si acabaría gustando, pero aun asi gracias por dármela a conocer.
ResponderEliminarPD: Me gustaría invitarte a mi blog http://letraslibrosymas.blogspot.com/ yo ya te sigo =)
Un beso
Por allí nos vemos, Espe =)
Eliminar¡Besines!