Nadie es más que nadie (Miguel Ángel Revilla)

Lo de la política, con la que está cayendo, no está muy de moda hoy en día, es innegable. Y si tuviese que definirme, una de las cosas que seguramente diría es que no me gusta la política. Tengo mis ideas, como todo el mundo, pero en cualquier conversación prefiero hablar de casi todo salvo de política. Y cuando lo hago, suele ser en clave más bien satírica y de humor. Pero como dicen los Foo Fighters, “I have another confession to make”, y os diré que Miguel Ángel Revilla, el autor de este libro, es uno de esos poquísimos políticos que considero casi carismáticos.

Por eso, porque me recomendaron este libro, y porque me apetecía leer algo distinto a lo habitual, llegó a mis manos “Nadie es más que nadie”. Un libro que, si tuviese que resumir en un adjetivo diría que tiene mucho de interesante. Es interesante conocer cómo Miguel Ángel nos narra sus orígenes, más bien humildes, o sus primeros años universitarios. Cómo la reivindicación y la política se van colando en su vida del mismo modo que la vocación irrumpe en cualquiera de las nuestras. O cómo son esos primeros y modestos pasos de carrera política, que culminarían en su etapa como presidente de la vecina Cantabria durante dos legislaturas.

Pero más allá de la figura del propio Revilla, creo que la parte más aprovechable de este libro viene después, cuando el autor nos narra una serie de anécdotas que se distribuyen a lo largo de toda su vida política. Algunas emotivas, otras divertidas y con la constante dosis de humor que caracteriza a este hombre. Sirviéndose de ellas, Miguel Ángel nos traslada una visión distinta sobre algunos personajes de sobra conocidos por todos. El enfoque lo es todo, y lo que tendemos a atisbar tras una pátina de protocolo o de fama a veces no es tan diferente, ni tan especial. Así, personajes muy ligados a la política como José Luis Rodríguez Zapatero, José María Aznar, Emilio Botín, o incluso el propio Rey desfilan ante nosotros entre estas páginas. También otros de sobra conocidos, pero que tienen menos que ver con la política, caso de Severiano Ballesteros y David Bustamante, entre otros. Algunos con mejor y otros con peor consideración dentro del juicio de este hombre.

Muy destacable es, por último, “La jungla de los listos”, el capítulo que cierra la narración y en el que Miguel Ángel Revilla, desde su faceta de economista y con un pulso muy ameno, aborda a modo de análisis la crisis, la situación política y otros aspectos de la realidad social de hoy en día.

Uno de esos libros a escoger más por autor que por propio contenido. Porque aunque nos revele opiniones y anécdotas muy curiosas y atrayentes, Revilla se nos presenta aquí sobe todo como un muy solvente narrador, capaz de atrapar con sencillez y un estilo de lo más directo al lector.

Hoy no pienso ser nada original y la recomendación es más que sencilla: Si os gusta este hombre, os gustará este libro.