“Elvira” es la última novela de Rubén Angulo, a quien ya conocíamos en el Desván con otra novela
bastante especial o, cuanto menos, diferente: “La escritura necesaria”.
Y aunque hay alguna similitud, por ejemplo en cuanto a desarrollo de personajes,
Rubén ha apostado en este caso por una trama marcadamente más cerrada.
La historia incomoda y agobia a partes iguales al lector desde los primeros
compases. A nuestro protagonista, un funcionario amargado y gris, lo conocemos
ya atrapado y de una forma que podría antojarse absurda de primeras. Durante
sus tareas diarias, unos palés se le vienen encima poco menos que sepultándole,
abortando cualquiera de sus posteriores intentos por liberarse. Sin embargo,
muy pronto descartaremos la hipótesis del accidente al tiempo que descubrimos a
Elvira, personaje radical que da título a la novela.
Un buen acierto para la historia claustrofóbica que parece de primeras
que tenemos entre manos está en la ambientación.
Un antiguo edificio, un viejo psiquiátrico, que nos regala algún destello
sobrenatural y nos sirve como marco al aislamiento al que nuestro protagonista
se ve sometido. La angustia y la
impotencia irán in crescendo y lo que se antoja una reacción natural, la
introspección y la mirada hacia uno mismo como escape, se convierte también en
la fórmula a la que el autor recurre para ir trazándonos su historia.
Tendremos, pues, una narración de
hechos presentes que se corresponde con esos tintes más claustrofóbicos, y que
sin embargo resultará un tanto accesoria, casi como una excusa o como un nexo
hacia la otra esfera que es la que prima. Como intercalado, tenemos esos tramos
de introspección, recuerdos, intimidad y
proyección al pasado que nos irán delineando tanto a nuestro protagonista
como a Elvira. Ambos ambigüos, errantes,
algo inestables y muy lejos de polarizaciones.
Estamos pues, en lo esencial,
ante una originalísima historia de personajes, una suerte de duelo muy
singular. Una relación compleja, impetuosa, una montaña rusa entre dos perfiles
difíciles que no ocultan sus sombras ni su lado menos magnético. Eso los hace tan
insoportables en algún punto narrativo, como sólidos y verosímiles al mismo
tiempo.
Una historia diferente y una
prosa que aquí parece ajustarse como un calcetín a su desarrollo, a esos
vaivenes y esos contrastes, alternando
elegancia, sobriedad, e incluso cierta rudeza
en algún momento. Una apuesta distinta que seguramente no se ajuste a cualquier
lector, pero sin duda meritoria por ese afán por desligarse de cualquier cliché.
Su planteamiento me parece muy original pero no termina de llamarme la atención.
ResponderEliminarMuchas gracias por la reseña.
Besos.
Ya desde ese punto de partida es bastante singular, y desde luego tampoco es lo que podría parecer de entrada.
EliminarUn beso, tabuyo!
Hola! No solemos leer novelas como esta y la verdad es que nos ha llamado especialmente la atención. Gracias por la reseña, le daremos una oportunidad a este autor.
ResponderEliminarUn saludo!! ^^
Me ocurrió exactamente lo mismo cuando me topé con la sinopsis y empecé a leer reseñas. Cualquiera de las dos novelas de Rubén creo que sirven para ver muy bien esa línea distinta por la que apuesta.
EliminarSaludos.
Mmm que curiosa me ha resultado, me atrae y no me atrae la verdad. A ver si puedo echarle un vistazo.
ResponderEliminarUn beso!
Es llamativa de inicio y realmente original a medida que vamos avanzando en la historia, Lesincele. No es nada típica.
EliminarUn beso para tí y gracias por pasarte.
Muy buenas Rober.
ResponderEliminarGracias, lo primero, por tomarte tu tiempo.
A veces parece que hago una reseña de la reseña, y cierto que uno va aprendiendo a no interrogar a los lectores.
Las novelas que yo guardo en el recuerdo son aquellas que de alguna manera me agitaron por dentro, ya sea que me incomodaran o todo lo contrario, aunque es más probable la primera opción ¿no? Aquellas novelas que te resultan agradables terminan pasando, quizás, como sucede con cualquier recuerdo; los malos terminan por imponerse y se quedan ahí por más tiempo del deseado.
En fin, que me alegro de haberte "agobiado" un poco, en el sentido de que te he hecho vivir un par de horas intensas, que no es poco.
Seguiremos ahí, en la brecha, escribiendo historias desasosegantes. Lástima que será difícil igualar la intriga de "Elvira" y vendrán, como ya la preceden, novelas igual de inquietantes pero sin la chispa de "Elvira".
Abrazo de Rubén y ¡Feliz Navidad para los presentes!
Creo que nunca se sabe hacia dónde nos llevará esto de las letras, pero a mí me gustará asociarte más que con "Elvira" o con "La escritura necesaria", con esa manera diferente y atípica de ir hilándolas y construyendo historias. Reconozco que soy de los que disfruto de lo típico en narrativa y de los thrillers más convencionales, pero también con estas propuestas distintas y este aire fresco. La variedad y lo diferente enriquece la literatura aún más.
EliminarUn abrazo y, como digo siempre, que sean muchas más.
Un placer leerte, Rubén!
Has dicho palabras mágicas como diferente, original y montaña rusa. Cómo resistirte a subir, tercera reseña además que me pone los dientes largos con esta historia. A ver si entre Noel y los otros tres me lo traen. ¡Vamos que nos vamos!
ResponderEliminarUn besín
Si te apetece algo diferente tú ponla tres o cuatro veces en la carta de turno, a ver si cuela ;)
EliminarSi te apetece alejarte de lo convencional, la verdad es que es estupenda. Y se nota cierta evolución además en la prosa del Rubén de "La escritura necesaria", creo.
Besines!
Pues fíjate que hasta ahora no me había llamado la atención pero ahora con esta reseña veo más puntos en común y afines a una historia que me gustaría bastante, la verdad es que después de haber leído otras reseñas no me lo esperaba. Un abrazo, Rober.
ResponderEliminarA mí, sin entusiasmarme del todo la sinopsis, sí que me picó por lo singular que parecía lo que iba a encontrarme, algo que se fue confirmando reseña a reseña. Le ha tocado esperar precisamente a uno de esos momentos en que apetece romper con lo típico y ponerse con algo más singular, pero ha sido un acierto.
EliminarUn abrazo, Yossi
Sabía que te gustaría, Rober ¿No te da la sensación de que sería una muy buena película de terror psicológico? Me parece muy acertado que hables de sensación de claustrofobia y además la atmosfera del psiquiátrico le da densidad a la propuesta de una novela inquietante. Bss
ResponderEliminarSería una película de terror psicológico también bastante diferente, supongo que un poco más íntima que a las que estamos acostumbrados, pero sí que me pega.
EliminarSolo es una de las dimensiones de la historia, es cierto, pero esa parte más claustrofóbica, y no solo en el sentido más físico, me ha parecido muy bien conseguida.
Besines!
Me gusta.
ResponderEliminarVego de leer otra reseña en otro blog y me ha llamado mucho la atención =)
Besotes
Pues espero que al final te animes y nos cuentes, Shorby! :)
EliminarBesotes!
Aún no lo he leído pero es un libro que pasará por mis manos
ResponderEliminarFelices Fiestas
Besos
Igualmente, Mientras. A ver qué te parece a tí cuando le hinques el diente, que tengo curiosidad ;)
EliminarBesos!
Pues yo no lo leí la anterior del autor. Leí una reseña en el blog de Albanta y si te digo la verdad, se lo dije también a ella, la cubierta de este libro me descolocó un poco porque pensé que era juvenil. No sé si el libro sería para mí o no. A veces nuestra primera impresión es muy engañosa. Besos.
ResponderEliminarA veces las apariencias engañan y mucho, esta portada es un ejemplo estupendo. Aunque también creo que esa especie de inocencia que destila tanto colorido es un reflejo de una parte de la historia, en algún sentido. A mí también me descolocó de entrada. Una vez leída, ya es más interpretable ;)
EliminarUn beso, Marisa!
La portada me llama y las reseñas que están saliendo señalan que es un libro que se sale de lo común, así que a pesar que el terror no me va, quizás lo lea. Felices Fiestas, 1beso!
ResponderEliminarCreo que no es imprescindible ser un aférrimo al terror esta vez para disfrutarla, Tizire. Es mucho más que una novela de terror al uso.
EliminarUn beso!
Vaya, por la portada tan colorista no me hubiese imaginado lo que en su interior esconde. Parece interesante, y aun así no sé si me llegaría a gustar. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarFeliz año Rober ;)
No conocía ni la novela ni el escritor... :S así que gracias por presentármelo!
ResponderEliminarun abrazoteeee!