Todo cambia. Unos vienen, otros van, y quién sabe si los que hoy se aproximan un día se alejarán sin más. Todo cambia y todo ha cambiado desde que hiciste tu aparición en ese lúgubre escenario del teatro que es la vida.
Sí recuerdo el año. No recuerdo el mes, ni tampoco el día exacto, y ten por seguro que no haré ningún esfuerzo por intentar atraer hacia el presente tales reminiscencias. No es correcto ni aconsejable dejar nuestra vida atrás, pero bien sabes que parte de la mía se fue contigo para no regresar. Con el tiempo, los golpes, y esas transparentes lágrimas que tanto enseñan, he aprendido que es mejor ignorar aquello que un día nos hizo más daño del debido aunque para ello haya que sacrificar una parte de uno mismo.
Pero no hay humano capaz de ignorar perpetuamente, y siempre habrá imágenes, más o menos difusas, que el pasado posará de vez en cuando en nuestra mente. Con el tiempo me he apercibido de que regresan cada vez más borrosas y cada vez con menor frecuencia. No estoy seguro de que sea bueno, pero me alegro de que sea así. Cuando ese dolor que va más allá del físico aprieta, o ha apretado alguna vez, todo el mundo se cansa de hacer cosas buenas.
Ahora miro atrás y veo que, durante varios meses, me dediqué simplemente a aguardar, como esperando no una llamada o una disculpa, sino más bien que todo se estabilizase a mi alrededor y algo me proporcionase un rumbo. Me hallé como el que se extravía en un oscuro cruce de caminos, tras ver horrorizado cómo la luz que iluminaba su senda se consume devorada por el viento. No sabe qué hacer, ni exactamente adónde ir, y sólo le queda encomendarse a los astros, o a cualquier deidad, y contar las horas hasta que el sol despunte y revele un camino.
Todo cambia y todo ha cambiado. No estoy seguro de si ha amanecido ya en el cielo que observo, ni si la ruta que pretendo seguir es la adecuada y me conducirá a alguna parte. Pero sí tengo certeza de que ha cambiado y prefiero comenzar a avanzar unos metros antes de consumirme entre la penumbra y un silencio que siempre llevaré a mis espaldas. El comienzo, de momento, no es sencillo. Demasiados escollos y demasiadas ramas arañan mi piel y dificultan mi avance. Pero pese a contar con escasas fuerzas, y vacilar a cada paso, creo haber atisbado algo al horizonte que me incita a no cesar de recorrer este camino.
El dulce sabor a leche condensada en el café, los acres olores que flotan entre vetustas calles, la estación, el parchís, el calor de otras manos, una inocente sonrisa perpetua mirando a la nada. Quizá haya recorrido un tramo mayor que el que suponía. Ahora que echo la vista atrás, el cruce se antoja ya lejano.
Rober escucha "La frase tonta de la semana" de La Quinta Estación
Te odio... Te odio por ganarme al billar, por ganarme a veces al póquer, pero sobre todo hoy te odio por hacerme llorar con esto, y a estas horas...
ResponderEliminarSabes que desde el viernes estoy alto tontona... me has tocado la fibra sensible. He sentido cada letra que escribías... Supongo que más gente se reconocerá en estas letras, pero lo pasado, pasado está.
Un besazo feo de grande!
O.O
ResponderEliminarHacía tiempo que no leía nada de lo que escribáis (a parte de lo del msn), y aunque no tenga tiempo para estar aquí, me alegro de haberte leido. Aunque me ahs dejado un poco... pensativa, quizás?
Le daría más vueltas a tus palabras como suelo hacer, y diseccionaría un poco esto ^^ y te preguntaría si yo soy uno de esos astros k alumbraban un pokitín cuando no había sol, y cosas así (ya me conoces :P) Pero tengo que estudiar... que no me sé casi nada, por no decir que nada. Y me llaman mis padres para cenar.
Venía sobre todo, para decirte que si lueg no me conecto o lo que sea, que te valla bien mañana en la Uni ;) Y luego para saber si llamarte a las 11 como siempre o no?
Besazooooooooos!! Lueg seguro que un rato entro... pero por si acaso, nunca se sabe.
Toda la listaaa!!
PD: Yo más ¬¬
me invento un msn a boleo para ver si lo de contacto es así o no... lo siento x el dueño del msn este, si es que hay xD
ResponderEliminar. . . itsasne . . .