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martes, 4 de mayo de 2010

Un imán de nevera para un relato

Curioso mundo el de los microrrelatos. He de recocer que nunca le había prestado una atención especial hasta esta mañana, que he recibido uno en un formato tan extraño y doméstico como un imán de nevera.


Ha sido el obsequio con que los almacenes FNAC encabezaban cada uno de sus pedidos realizados el pasado 23 de abril, día del libro. Se titula “De nuevo” y reza: “En cuanto acaba el libro y lo cierra ya lo ha olvidado por completo. De modo que observa un instante la cubierta, con curiosidad, y acto seguido busca la primera página y empieza a leerlo.”
Y es que esto de los microrrelatos debe tener su ciencia. No ha de ser fácil construir dos o tres frases para resumir al máximo una historia, o cualquier idea. Hasta ahora nunca les había logrado hallar el atractivo, porque quizá nunca me había parado a buscar la otra historia, lo que esas escasas líneas insinúan, pero no citan.
Quim Monzó, autor de “De nuevo”, explicó en su día esa “segunda historia”. Según comenta, su relato nació observando a su madre, que sufría de una enfermedad similar al Alzheimer. En más de una ocasión, tras terminar un libro, ella se quedaba como hechizada por su portada y, segundos después, buscaba de nuevo la primera página con voracidad, tal como se narra en el relato.
Siempre se ha utilizado mucho esa expresión, “leer entre líneas”. El problema es que en este caso hay pocas líneas en que escudriñar. Sin embargo, esa historia desconocida, como suele ocurrir en esto de la literatura es, si cabe, más fascinante que la que comprende el propio relato.

7 comentarios:

  1. MOla el "imanín" y el "microrelato" .... yo también quiero uno!!!!!!!!!!!!!

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  2. Jajajajaja Toma regalito curioso el que te dieron =) Mola!!

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  3. Pues sí, por lo menos es curioso.

    ¡Gracias, chicas!

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  4. Curioso mundo el de los microrelatos. Como bien dices, a veces dos simples líneas encierran un mundo detrás que expresan en pocas palabras todo un mundo.
    Bonito detalle el de fnac!!!!

    Un abrazo, Rober.

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  5. Y no veas lo bien que queda en la nevera jajaja

    Sí que es curioso, Ana. ¡¡Un beso!!

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  6. Hola me ha parecido genial la idea del imán. Cuando tenga oportunidad la adaptaré en mi trabajo. Es una forma de aguzar el ingenio. Un saludo.

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  7. Pues sí.

    A mí lo que me fascina es poder crear una historia así, con tal mensaje, en tan poco espacio, con tan pocas palabras.

    Gracias por comentar, Trinidad. Me alegro de que la idea te haya servido. ¡Un beso!

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